Pedro medina es gay

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Siendo un chiquillo, lo mandaron a la zafra en Manga Larga, un lejano paraje camagüeyano, y desde allá lo llamaron para la preselección nacional juvenil por recomendación de Ramón Carneado, un visionario de la pelota cubana y otra leyenda: hasta hoy ostenta el récord de ser el único mánager con cuatro títulos consecutivos en la historia de las Series Nacionales.

“Mandan un telegrama para la unidad militar de Camagüey solicitándome para esa preselección, y salí por mis medios para La Habana.

“Sí, pero eso es lo que sabe todo el mundo”, me contestó enseguida, y encendió el televisor para mostrarme un video que yo nunca había visto.

Lo primero que me impresionó es que en su adiós, aunque fue en el Latino, no llevaba el uniforme azul de Industriales, sino el traje blanco con ribetes y números rojos que usaba Ciudad Habana en las Series Selectivas.

Durante años compartió el Cuba con Juan Castro y Albertico Martínez, como receptor fue grande, como persona fue inmenso. Cuando se hablaba de Medina, casi todo comenzaba y terminaba en el jonrón de Edmonton, pero en ese momento a mí me llamaba más la atención la sobriedad y el temple del mítico 31 de los Industriales como director.

En realidad, esa es mi primera imagen de aquel gigante: no bateando, no cubriendo detrás del plato, sino dirigiendo las huestes azules que desafiaban el poderío de la “Maquinaria Naranja” de Pedro Jova.

All rights reserved. Sin embargo, en el Quintín los niños nunca han dejado de jugar pelota. Además, fue campeón de bateo de la cita continental del 83 y Todos Estrellas en la lid del orbe del 80.

pedro medina es gay

Los niños son salvados y se reúnen con Montserrat. Nos quedamos con su recuerdo, con sus grandes batazos, con su amor a la camiseta, con su maestría. Pedro Medina dispara a José Luis pero Alejandro le salva la vida. “Llegaron y me sorprendieron, porque yo estaba buscando fuerzas para esa despedida.

Falleció nuestro gran amigo Pedro Medina. José Luis visita a Víctor en el hospital  y obligan a Graciela a llevarlos a dónde están los niños y en cambio ella se lanza de un despeñadero.  Monterrat se entera de que su madre se suicidó, pero Dimitrio no está seguro porque nunca encontraron el cuerpo.

José Luis dice a Alejandro y Montserrat que el médico que mintió para Graciela ha sido detenido, y que él jura Laurito y Romina estará con ellos de nuevo.

Pedro Medina, los fanáticos de Industriales estamos de luto, los conocedores de la pelota cubana también. Un gran conocedor y siempre con las palabras adecuadas y un hombre muy afable”, escribió en redes sociales.

Con aquella victoria, “El Médico” entró en el exclusivo club de los peloteros que han ganado la Serie Nacional como jugador y como mánager.

Aquello me sorprendió, porque no venía mucho al caso, pero enseguida me percaté de que quería rebobinar el casete y volver a vivir aquellos momentos de mayo de 1988.

Le dije que lo poco que conocía de aquel día lo había leído en artículos de prensa en los que describían esa última llamada del locutor oficial del Latinoamericano, el también recordado Tony Veiga, y su roletazo al campo corto contra los envíos del derecho Roberto Almarales, hijo ilustre de Santa Isabel de las Lajas y pieza clave de Azucareros en las Selectivas.

Después, me dejó sin aliento ver a Medina arrodillado antes de su último turno, como si el mundo se le viniera encima.

Lázaro Valle fue el primero en salir del banco a animarlo y luego vinieron sus otros compañeros, además de Víctor Mesa, Lourdes Gourriel y demás estrellas de Azucareros, el rival de turno. En ese momento, el famoso cantante, Jorge Medina, no pudo ocultar la inmensa sorpresa que se llevó al saberlo y sin poder evitarlo reaccionó inesperadamente a la noticia, causando gran shock en los espectadores.

España, por poco más de seis años fue feliz en su relación con Ranferi Aguilar, sin embargo, en todo ese tiempo la mantuvo en secreto pues no se proclamaba homosexual de manera pública en ese momento.

De hecho, solo dos años después ya estaba jugando en los clásicos nacionales con la franela azul de Industriales, la cual defendió durante 12 temporadas. Todo cambió cuando el amor de su vida, en el 2012 perdió la vida a causa de una neumonía, así que este al despedirse del hombre con el que deseaba pasar el resto de su vida, hizo oficial que pertenecía a la comunidad LGBTQ, y recibió el apoyo de millones.

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Pero, tal parece que esta noticia no llegó a todos los oídos en el mundo artístico, pues Jorge, el intérprete de temas como Mi Segunda Vida y Ya No Te Buscaré, confesó que no sabía que Lalo era gay.

Si ganamos, ganamos todos; si perdemos, perdemos todos”, me decía; una lección que siempre trataba de dejar por donde pasara.

Más que el jonrón, ese es su verdadero legado de Edmonton.

Mi primer recuerdo

Llegué al béisbol por las historias de mi abuelo Enrique, un industrialista empedernido que perdió su reloj más preciado en el Latino el día del jonrón de Agustín Marquetti para decidir la Serie del 86 contra Rogelio García y los Vegueros; un fanático en toda la regla que tenía envuelta como un tesoro una pelota firmada por varias leyendas de los azules; entre ellas, Pedro Medina.

De “El Médico” mi abuelo me contó varias historias cuando empecé a interesarme por la pelota a mediados de los años 90.

Contacté con dos personas cercanas y me confirmaron la partida, pública después en los espacios virtuales por reportes del periodista Pavel Otero y de René Arocha, otra gloria del béisbol cubano y amigo muy cercano de Medina.

“Casi al mismo tiempo me acaban de llamar Euclides Rojas y Lázaro Vargas para darme una noticia de esas que uno no espera recibir.

Entre los mensajes más sentidos, me quedo con cinco que demuestran claramente la estatura profesional y humana de Medina y el legado que dejó:

Félix Julio Alfonso (historiador): “Adiós al inmenso receptor Pedro Medina Ayón, entre los más grandes peloteros cubanos en cualquier época, se va sin ver su nombre reconocido en el Salón de la Fama del Béisbol Cubano.

Y así fue, en el noveno, con la soga al cuello, a punto de claudicar, a Borges no le quedó más remedio que entregarle el bate al 31, que mandó la pelota directo a un transformador y luego se perdió en una arboleda más allá de los límites del Rencrew Park.

Por desgracia para Cuba, después del batazo de Medina se perdió ese encuentro en la décima entrada por un error mental de Pedro Jova, torpedero natural que asumió cubrir la antesala en aquel torneo y, en la última jugada del encuentro, capturó un roletazo pegado a la línea de tercera y no tiró a la goma para sacar al corredor norteño porque pensó que era foul.

De ese detalle Medina evitaba hablar.

José encuentra a los niños en jaulas. Fue el primer receptor que superó el umbral de los 200 vuelacercas y las 850 empujadas, suficiente para merecer la etiqueta de inmortal.

Su historia de Edmonton

Pedro Medina salió campeón de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Medellín (1978) y Santo Domingo (1986); de los Panamericanos de San Juan (1979), Caracas (1983) e Indianápolis (1987); de los Mundiales de Italia (1978), Japón (1980), La Habana (1984) y Holanda (1986); y de las Copas Intercontinentales de La Habana (1979) y Bélgica (1983).